‼️El jugador del Barça al que Xavi ha pedido que se vaya.

Llegó al Barcelona en 2016 con la ilusión de convertirse en el sucesor de Carles Puyol. El francés, Samuel Umtiti empezó su aventura azulgrana con pie derecho, pero con el paso de los años, se ha convertido en un dolor de cabeza para la directiva. En las oficinas del Camp Nou ya no quieren contar con sus servicios a tal punto que el presidente Joan Laporta está presionando por todos lados para firmar su salida en el mercado de fichajes de invierno. El campeón mundial en Rusia 2018 no entra ni entrará en los planes de Xavi Hernández en lo que queda de temporada. Es el jugador del Barça al que Xavi ha pedido que se vaya.

El Barça quiere a Umtiti fuera definitivamente. El préstamo a otro club ya no es opción porque al defensor central no le queda mucho tiempo de contrato en el Camp Nou (junio 2023). Esta razón obliga a venderlo aun con una oferta a la baja.

Dificultades

“La idea del Barça es desprenderse de forma definitiva de Umtiti, aunque saben que será difícil. En verano se puso sobre la mesa la posibilidad de rescindirle de forma unilateral y la idea sigue ahí, aunque en el club esperan que el francés tome ya la decisión de salir de mutuo propio”, publica el citado medio catalán.

Umtiti, a pesar de que dejó de ser hace mucho tiempo un indiscutible en el Barcelona, ha recibido varias propuestas de equipos importantes de las ligas top de Europa. Sin embargo, el francés las ha rechazado todas porque su ilusión es volver a ser el titular fijo que alguna vez fue.

Ostracismo

El ostracismo en el que se encuentra Umtiti no solo obedece a que sus lesiones no lo dejan rendir como antes. También a la gran cantidad de centrales que ya tiene el Barcelona: Eric Garcia, Ronald Araújo, Gerard Piqué, Clément Lenglet y Óscar Mingueza.

El Barcelona espera hacer caja con un jugador que no tiene futuro en el Camp Nou y que por temporada se embolsa entre 8 a 9 millones de euros. Semejante cantidad de dinero, ahorrada en salarios, ayudará al club azulgrana a mitigar la dura crisis económica por la que atraviesa.

Daniel Piqueras